En lo mismo, la profesional invita a parar un momento y evaluar nuestra sexualidad y ver el grado de importancia que tiene esta área en nuestra vida. Para cumplir con este ítem, la reflexión y estar consciente de nuestro «diagnóstico sexual» es clave.

2. La honestidad ante todo

En este segundo consejo, Carola invita a las personas a que se pregunten: ¿qué tan satisfecho (a) estoy con mi sexualidad?, en lo mismo, hay que ponerse una tabla de evaluación del 1 al 7 y autoevaluarse. «Sirve mucho cuantificarlo y es re valioso cuando esa nota la aumentamos, es súper satisfactorio y hacer esto nos motiva», comentó. En este punto 2, se pone a prueba la sinceridad y la persona evalúa su intimidad, por ejemplo: encuentros sexuales, satisfacción, rendimientos, etc.

Además, nuestra panelista es enfática en decir que la autoevaluación «debe ser compasiva» con uno mismo, y tener honestidad sobre lo que ocurre internamente frente a estos temas.

3. ¡Vamos a la acción!

Aquí la sexóloga nos indica que debemos plantearnos una pregunta y responder: ¿qué tendría que cambiar para subir dos puntos en la nota que me puse? (en el ítem anterior). El plan en esto es realizar objetivos específicos para mejorar. Carola propone en este punto lo siguiente: «hay que conocerse un poquito más, (conocer el cuerpo) a través de masajes o mirarse más en el espejo», expresó. Sumado a que también no hay que olvidar los chequeos médicos, exámenes y mantener actualizado el control de salud sexual.

4. Cuidémonos de los enemigos

En este ítem, Carola Fernández menciona que después de tener chequeados los puntos anteriores, aquí van a aparecer obstáculos en el camino. «Esto tiene que ver que vendrán sabotajes en el camino y qué cosas en este plano podrían jugarme en contra. Por ejemplo: quiero tener relaciones con mi pareja al final del día, pero sucede que estamos habituados a ver una serie, pues, ahí tenemos un posible obstaculizador. Hay cosas en la rutina que sabotean nuestra sexualidad», comentó.

Otro punto, dentro del mismo tema,  son los pensamientos limitantes. «Son aquellos que no los llamamos y te tiran para abajo. Un buen ejemplo es cuando me propuse bajar una aplicación de citas y en el proceso, te dejas llevar por los prejuicios y crees que las personas que descargan este tipo de plataformas son quienes fracasan en la conquista», dijo.  Finalmente, es «la voz interna chaquetera» que nos atormenta y que debemos atacar inteligentemente.

Uno de los consejos que la especialista comparte, es conversar con nuestro círculo de confianza sobre nuestras experiencias y propósitos sexuales. Ya que, cada uno vive una condición emocional distinta y entre cercanos, puede darse un valioso apoyo. En esto, comentó que «apañarnos» con la pareja o amistades, servirá mucho.

5. Imaginar

En el paso a paso llegamos al momento de analizar y manejar nuestros pensamientos. Con esto, Carola menciona lo siguiente: «pasa algo interesante con el cerebro. El cerebro no sabe si lo que imagina es real o es mentira. Si yo me imagino que saliendo de la casa me va a pasar algo malo o que los hombres  son todos malos, finalmente lo vives como una amenaza real.

La imaginación es importante porque podemos llevar el cerebro como a la inversa. Así lo explica Fernández: «yo te invito a cerrar los ojos, y pensar que estas limitaciones, del punto cuatro, no existen. Visualiza que todos los pensamientos y obstáculos los puedes resolver y observa cómo se ve tu mundo desde ahí. En esto, es muy increíble como sientes satisfacción con tan solo imaginarlo».

6. Plantear la fecha para la revisión de tus propósitos

La idea de este punto es que vamos fiscalizando nuestros microobjetivos. «A esto hay que ponerle fecha, de pronto pueden ser tres meses. Hay podemos ir viendo si tenemos que reencauzar el objetivo porque quizás me di cuenta de que necesitaba hacer otra cosa antes o que prioricé otros elementos», comentó Carola Fernández.

En cuanto a los plazos para ir logrando los propósitos sexuales, la profesional mencionó que tres meses sería el tiempo ideal como tope máximo. «En psicoterapia a los tres meses ya veo cambios. A esa altura, si hay compromiso, debería algo estar pasando», agregó.

Ahora, en la cantidad de objetivos que tienen que proponerse las personas, la sexóloga recomendó segmentar las aspiraciones sexuales para este año.

«Yo lo dividiría, por ejemplo, los objetivos sexuales ligados a la salud, hacerse cargo de salud sexual, ahí me pondría uno. Otro objetivo ligado a la exploración de prácticas nuevas, ahí pondría uno. Ahora, en cuanto a relaciones, que pueden ser sobre generar espacios y hablar de nuestra sexualidad, otro», comentó.