Matías: <<En mi caso, porque cada uno hacía sus personajes y sketches, no me modificaban nada, me daban caleta de libertad. Yo no me puedo quejar>>.

De las redes sociales a la televisión

Matías también recordó su paso por Casado con Hijos y El Antídoto. Relató cómo llegó a estos programas gracias a sus videos en redes sociales, destacando especialmente su personaje de «Patroncito», un narco mexicano improvisado con mucho éxito, que ganó popularidad durante la pandemia.

Tomás: <<¿Qué tan difícil es hacer lo que haces en redes sociales y llevarlo a la tele? No en términos de decisiones, sino más en términos de creatividad. ¿Qué funciona en una red social y qué funciona en la tele?>>

Matías explicó que la transición de las redes sociales a la televisión es complicada porque son dos mundos completamente distintos: <<En redes sociales tení libertad y podí hacer lo que querai. Te podí equivocar y tirar una fomedad, da lo mismo, al otro día subí otro y lo tapai. Pero en la tele, fallai una vez y te crucifican.>>

Tamayo utiliza principalmente Instagram para compartir su trabajo, que incluye sketches, a menudo junto a su amigo y compañero Altoyoyo, y extractos de sus shows de stand-up en distintos locales. Riéndose de las cosas simples de la vida, el comediante ha hecho que muchos se sientan identificados con sus ocurrencias.

<<Con el Altoyoyo nos gusta la improvisación, todos nuestros videos son improvisación porque hacer guiones nos da flojera. Nos gusta hacer videos de oficios porque la gente se siente más representada>>, comenta Matías, recordando que de estos videos salió una de sus frases más icónicas: «Tss, la vidita.»

Creando desde atrás

Tomás: <<¿Te querí dedicar al stand-up?>>

Aunque se dedica a la comedia y le gusta hacer stand-up, Matías admite que no siempre es su prioridad y que disfruta escribir porque con eso ha pagado la olla. 

<<Me gusta estar en el escenario, pero no tengo ese ego de mostrarme y ser protagonista, yo puedo estar atrás escribiendo y lo hice mucho tiempo. Donde yo pueda hacer comedia soy feliz>>.

Matías se considera un comediante versátil, capaz de explorar diversas facetas de la comedia. De hecho, una de sus críticas hacia algunos compañeros del medio es la creencia de que la comedia se limita al stand-up. <<Hay comediantes que no son aptos para estar en el escenario y no entienden que la comedia se puede hacer de muchas maneras; están ahí por ego>>, comenta.

Gallina: <<¿Te gustaría ir al Festival de Viña?>>

Matías: <<No me imagino en el Festival. No quiero ser ese comediante de tener que pensar una rutina para caer bien a todo el mundo, una rutina masiva. No es lo que busco, nunca fue una idea o un sueño>>.